Hoy hace dos meses que nuestro primer juicio fue positivo. Fue... alucinante, uno de los mejores días de este durísimo proceso. Eran las 8.30h de la mañana, estábamos a punto de salir de casa para ir a trabajar y de repente... sonó el teléfono. Era Susana. Nada más ver su número en la pantalla pensé que algo pasaba y cuando descolgué, me dijo "ya ha sido el juicio y ha sido positivo", y yo "¿¿siii?? ¿¿en serio??? ¡¡¡quéeeeee bieeeen!!!" E iba saltando por el pasillo de casa. Fue un día radiante.
Sin embargo hoy, justo 2 meses después, 25 de enero, sobre las 10.30h, me ha sonado el teléfono, otra vez como hace 2 meses. Volvía a ser Susana. He cogido el teléfono sonriente, pensando que me llamaba para darnos fecha de segundo juicio, y me ha caído un jarro de agua fría cuando me ha dicho que el Mowa ha devuelto nuestro expediente. Por lo visto no nos darán fecha de segundo juicio hasta que el expediente no viaje a París, a la embajada etíope, a ser legalizado. No me podía creer lo que estaba escuchando... Pero... ¿por qué? No lo entiendo... Después de la noticia no podía ni seguir escuchando a Susana, me han empezado a caer las lágrimas pensando en mis niños. Se me hace incomprensible, llegados a este punto del proceso, que ellos estén allí y nosotros aquí... No entiendo absolutamente nada. Sólo he podido articular palabra para decirle que no lo entendía y que cuánto significaba eso, en cuánto tiempo se traducía ese trámite. De 15 a 20 días me ha dicho... Puede parecer miseria comparado con todos los años que llevamos esperando este momento, pero 20 días ahora mismo, en este mismo momento, es como una verdadera y larguísima eternidad. Se me hace muy cuesta arriba pensar que hay que esperar 20 días más, además de que ya sé por experiencia que cuando en este proceso se dice 1 día, son 2, cuando dicen 1 semana, son 2,... así que cuando dicen 20 días, son... ¿cuánto? ¿un mes y medio? ¿dos meses?
Llevo todo el día fatal. Estoy agotada mentalmente, lo que se traduce en un impresionante cansancio físico. Me iré a la cama intentando pensar que es la última piedra en el camino y que, aunque hoy esté realmente depre y sintiéndome sin fuerzas, mañana las sacaré de lo más profundo de mí y seguiré luchando por ellos, ellos se merecen eso y muchísimo más.
Hola Elena, soy Pilar, mujer de Diego, la pareja de Vitoria, estuvimos hablando hace un par de semanas.... Leí tu post y pensé en escribirte para darte ánimos. Nosotros nos enteramos ayer y hoy hemos recibido tu whatsApp. Así que hoy, más que nunca, te mando todos mis ánimos y un abrazo enorme. Va a ser un duro día, pero los habrá mejores, estoy segura. Pilar.
ResponderEliminarHola Pilar, muchísimas gracias por los ánimos y el apoyo que me envías. Viene muy bien en estos momentos, y más cuando provienen de compañeros de camino que saben y entienden tan bien este momento tan duro.
EliminarEste camino no te permite bajar la guardia ni un segundo... Hoy estoy mejor, aunque siga sin entender lo incomprensible. Supongo que a vosotros os debe pasar exactamente lo mismo. Muchos besitos Pilar y de verdad, gracias por enviarme esos ánimos desde Vitoria. De verdad que llegan.